Este pésimo desempeño sigue siendo considerado como una de las mayores frustraciones de la Selección Argentina en su historia. Después de la frustración de 1969, la AFA nombró a Juan José Pizzuti, que había ganado la Copa Intercontinental con Racing Club tres años antes, como entrenador de la selección nacional. La pantalla gigante con la que contaba el estadio mostró la jugada, y al verla, los jugadores mexicanos fueron a buscar al árbitro Rosetti y al juez de línea pero ambos decidieron validar el gol a pesar del fuera de juego.