Roberto «Tapatío» Méndez, legendario entrenador de fútbol americano, decidió en 1942 que el mote para la escuadra universitaria fuera el de «pumas», pues estaba convencido de que se trata de un felino que reúne las características que él deseaba en todo jugador: fuerte, agresivo, valiente, rápido e inteligente. Este es el origen práctico de dichas prendas, que al ser usadas por todas las marinas, y estar siempre presentes incluso en ceremonias, se generalizó hasta nuestros días.